¡Hola a todos!
Eso que dicen que “la primavera,
la sangre altera”, va a resultar ser verdad verdadera. Y no me refiero al plano
amoroso (ojalá), sino a que la primavera nos tiene a todos un poco revueltos. Y
si a eso le añadimos la astenia primaveral, apaga y vámonos.
Durante esta semana he oído a
varias personas decir que tienen crisis existenciales y opositoriles, que no
saben muy bien qué hacer, si seguir o no, si esto va a merecer la pena, si
deberían continuar luchando por alcanzar un sueño, su sueño. Que necesitan
desconectar unos días para recuperar esa ilusión que ya no tienen.
Yo, durante esta semana también
me he encontrado rara, me ha costado estudiar, seguir el ritmo (cierto es que
he aumentado el número de temas al empezar vuelta nueva), estar lo concentrada
que tendría que estar, y más que a una crisis, lo achaco a la primavera, a esa
famosa astenia que nos tiene a todos aplatanados, cansados, con falta de
energía.
Por eso, me ha parecido una buena
idea, y al igual que ya lo hizo hace un par de entradas MP, Mi vida: opositar y algo más,
recordar los motivos por los que empezamos. Creo que estaría bien que cada uno
de nosotros apuntáramos en un papel esos motivos que nos empujaron a emprender este
camino. No hace falta tener muchos, sólo los que a vosotros os bastaron para
decir tal día empiezo con las oposiciones. Como digo, apuntar esos motivos y
tenerlos bien presentes, delante de nosotros, para que los podamos ver
cada día y motivarnos y recordarnos a la vez que cada día estamos más cerca de
conseguirlo.
En mi caso, siempre he querido
ser Notario, desde bien pequeña, así que ese sería mi motivo principal. En esta
entrada os lo cuento un poco mejor, Por qué Notarias
El segundo motivo sería poder
decir aquello de LO CONSEGUÍ. La satisfacción de haber logrado algo con tanto
sudor y esfuerzo, donde nadie regala nada. Tiene que ser una sensación
maravillosa saber que eso que tanto hemos estado esperando y ansiando ya ha
llegado y que nuestra vida va a cambiar, para bien seguro, a partir de ese
momento. Se me ponen los vellos de punta sólo de imaginarlo, y yo que soy de
lágrima fácil, os podéis imaginar.
Unido al motivo anterior, y como
algo más personal, el demostrarme a mí misma de lo que valgo, de lo que soy capaz
y de lo que he conseguido. Aquí el orgullo y el amor propio juegan un papel muy
importante, si no lo peleamos nosotros cada día, nadie lo va a hacer.
Estos serían los motivos
principales que me ayudan a levantarme cada mañana y pasarme tantas horas
sentada en la misma silla. ¿Cuáles son los vuestros?, ¿os parece una buena idea
eso de apuntarlos para tenerlos presentes cada día?
Mucha suerte a ánimo a todos!
Gracias por leerme!
Un beso!
María :)
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Imagen: Google |
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Imagen: Google |
Me gustan tus motivos ;). Gracias por mencionarle.
ResponderEliminarUn beso y feliz sábado!
Muchas gracias!! Al final, más o menos, estamos por lo mismo!
EliminarMucho ánimo con la semana!!
Un beso!!
Hola! Muy cierto lo que dices. En la montaña rusa que es la oposición, cuando se asciende no hay que olvidar la humildad y tener los pies en el suelo, y cuando se baja hay que recordar los motivos positivos por los que uno inició el viaje y la recompensa final. Siempre positividad y a poder ser llegar al final, si bien también cada uno debe saber cuando acaba el viaje con todo el orgullo del mundo. Mucho ánimo y fuerza :)
ResponderEliminarHola Iván! Tienes muchas razón en lo que dices! Totalmente de acuerdo!
EliminarMucho ánimo también para ti!
Un beso!!