¡Hola a todos!
Hoy me apetecía escribir una
entrada un poco diferente pero que también tiene que ver con la oposición.
Quizás porque es sábado y ya estoy pensando en el día libre. Y es en qué
dedicamos el poco tiempo libre que tenemos a lo largo del día.
Aunque no lo parezca, es muy
importante hacer algo diferente a lo largo del día. Algo diferente que no sea
estudiar. Por ejemplo, en el descanso del mediodía, ir a dar una vuelta y ver
gente. Pasar por delante de alguna tienda, tomar café en el bar de debajo de casa...
Que preferimos quedarnos en casa
podemos ver alguna serie, escuchar música, dormir una mini siesta, o
simplemente quedarnos tumbados en el sofá mirando al techo y dejando la mente
en blanco. Algo que os sirva para despejaros, descansar la mente del estudio y
poder coger el turno de tarde con ganas.
Seguro que cada uno de vosotros
tiene su truquito diario para desconectar. En mi caso tengo que deciros que me
ha dado por ser una cocinitas.
Desde que estoy opositando se ha
despertado en mí un interés por la cocina que antes no tenía. Tampoco es que me
pase el día entero cocinando, pero sí es cierto que presto mucha más
atención y me gusta probar recetas nuevas, sobre todo, postres.
Cosas sencillas, que no me ocupen
mucho tiempo porque no lo tengo y que también me permitan tirarme en el sofá un
par de minutos y descansar. En mi caso, estar ocupada haciendo otras cosas me
ayuda a desconectar, tener la mente en otra cosa y no seguir dándole vueltas a
ese artículo que no acaba de salir.
Como os comentaba, esta afición
por la cocina me ha surgido desde que estoy opositando. Miro recetas, se las
comento a mi madre y algunas las hago yo. Como es decía también, suelo hacer
postres porque es lo más fácil, mezclar los ingredientes y meter en el horno. Y
también porque me gusta endulzar las comidas de mi casa.
No hago un postre cada día,
saldría rodando del opozulo, pero sí de vez en cuando, y sobre todo, en fin de
semana, así los demás pueden desayunar con mis creaciones (de momento no han puesto pega a nada, o lo hago bien o no me quieren decir que es una basura y se lo comen sin rechistar).
Concretamente, ayer por la tarde,
después de acabar de estudiar, me puse manos a la obra e hice un bizcocho de
zanahoria. A pesar de pelearme con el horno y se tostara más de la cuenta,
conseguí salvarlo, y he decir que a pesar de este pequeño percance, me ha
salido bastante bueno y muy esponjoso.
Tengo apuntados un par de postres
más para hacer como el bizcocho de yogur de MP, que es muy sencillo también. Y ahora
que se acercan fiestas seguro que más de uno cae.
Y vosotros, ¿sois también unos
cocinitas?
Gracias por leerme!
Un beso!
María :)